Programa de Salud y Medicina Familiar UdeC

Enero.  Probablemente las palabras que más escuchemos en este mes sean “evaluación”, “planificación”, “resultados”, “cierre”, “términos de procesos”, “balance”… Enero como inicio de un nuevo año nos remite a un punto de partida, a nuevos propósitos, a ilusiones, nuevos proyectos en mente, esperanzas y desafíos.

En este sentido, quizás uno de los principales desafíos en este comienzo de año es retomar la capacidad de hacernos preguntas. Rescatar la oportunidad de preguntar-nos y asombrar-nos.  Las preguntas, a decir de Cristian Warnken, “constituyen un regalo porque nos desinstalan de nuestras cómodas y estériles certezas, y nos abren un cielo de dudas y perplejidades que hacen que esta vida merezca la pena de ser vivida, y no “sobrevivida”.

Recordando el discurso del Presidente de Uruguay, José Mujica, en la Cumbre de Río,  lo que más me quedó grabado no fueron las palabras en sí sino las preguntas que planteó: “¿Qué es lo que buscamos?” “¿Somos realmente felices?”

La invitación es que este nuevo comienzo en el 2013, sea también la oportunidad de sentarnos a reflexionar, a mirar-nos y a continuar haciéndonos preguntas, a redescubrir nuestra capacidad de asombro, a disfrutar de pequeños momentos, de detalles vividos en el día a día, construyendo colectivamente una felicidad creadora.

Según  José Mujica: “venimos al planeta para ser felices. Porque la vida es corta y se nos va. Y ningún bien vale como la vida y esto es lo elemental.” Y como dice una amiga, que en el 2013 no nos falte tiempo para preguntarnos si la felicidad está presente en lo que hacemos.