Page 12 - Cuadernillo 2014
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TERCERAS JORNADAS DE
                                   BUENAS PRACTICAS EN APS Y SALUD FAMILIAR 2014

• La puesta en marcha de esta estructura ha permitido también un mayor trabajo comunitario y
    promocional.

Finalmente, a modo de corolario podemos destacar que se ha establecido en el CESFAM una mirada
sustentada en un lenguaje común; transversal en torno a la salud mental y de carácter no
“patologizante”, que ha favorecido el acercamiento con los usuarios. Esta mirada también ha
trascendido a los distintos espacios de trabajo clínico intersectoriales repercutiendo positivamente
en la situación de nuestros pacientes.

Análisis y Reflexión

La relevancia del proceso co-construido y reflexivo posibilitó generar localmente un lenguaje
unificado, ya no sólo desde la patología sino más bien desde criterios diseñados en conjunto.
Asimismo, la investigación añadió datos concretos que permitieron la validación de la puesta en
marcha del proceso, como también la medición de sus resultados. Con esto se logró acercar a los
distintos profesionales al abordaje de los problemas de salud mental, y des-parcelar a los psicólogos
de esta tarea, lo que ha permitido mayor transversalización y diversificación de las líneas de
abordaje en Salud Mental.

Finalmente, se puede decir que la posibilidad de haber generado esta experiencia, permite otorgar
atenciones de mayor calidad y calidez, con una mirada humana y justa respecto a las
individualidades de nuestros usuarios, donde los resultados de los procesos avalan la posibilidad de
otorgar nuevas miradas responsables del cómo intervenir y hacer salud.

Recomendaciones para Replicar

Para poder reproducir esta práctica en un contexto distinto al original es fundamental considerar
los tiempos necesarios para el proceso reflexivo. Para ello contar con una directiva altamente
sensibilizada respecto a esta temática es fundamental, tanto desde la lógica de validación de
tiempos así como de participar de los procesos de construcción.

Considerando lo anterior el siguiente paso es facilitar el inicio del proceso de un “Sentir Colectivo”
para luego desde lo metodológico producir una categorización co-construida con el equipo que se
adecúe a la realidad local.

Finalmente desde nuestra experiencia resulta central que los facilitadores de este proceso avancen
en su desarrollo con convicción y empoderamiento en un proceso de expansión progresiva, así se
evita el riesgo de que estos esfuerzos se pierdan al momento de trabajar un gran número de
personas.

La sistematización y edición de este relato ha estado asesorada por el Equipo de Buenas Prácticas del
Programa de Salud y Medicina Familiar – UdeC.
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